LA ENSEÑANZA DE SAN GREGORIO PALAMAS SOBRE LA GNOSIS DE LA SANTA TRINIDAD
(Por Amfiloki Rántovits, Metropolita de Montenegro)
No os cansaré mucho, principalmente porque he escrito un tratado especial sobre el Misterio de la Santa Trinidad según san Gregorio Palamás, al que le interesa más sobre este misterio teológico básico, como también muchas otras cosas que se han escrito en relación de la Triadología de san Gregorio Palamás y otras facetas de su teología.
La personalidad y la obra de san Gregorio Palamás constituyen el más alto punto brillante de la teología ortodoxa. Realmente él deduce las realidades y cosas básicas de la teología de los santos padres y las desarrolla de manera particular acorde de los acontecimientos, las necesidades y las provocaciones de su época. Esta es su teología y esta pone los cimientos de la auténtica teología de la Iglesia Ortodoxa de los siguientes siglos.
El logos real de hecho y praxis insigne como también el método y corazón del kerigma de san Gregorio eran y permanecen como el método y el testimonio de la Iglesia Católica Ortodoxa hasta nuestros días y permanecerá siendo así por los siglos. En esto se basa todo el kerigma de san Gregorio, por lo tanto también su kerigma «sobre la Santa Trinidad». Aquí no desarrollaremos la enseñanza entera obre la Santa Trinidad de san Gregorio Palamás, sino que intentaremos exponer algunos elementos básicos de su kerigma y su testimonio sobre «la única Trinidad monárquica» como piadosamente la llama y la única «dadora y guardián de la verdadera teología». Ya con la formulación particular suya, uno percibe de donde emana y surge la verdadera teología de la Santa Trinidad. La misma Trinidad es dadora y guardián de la verdadera teología.
En otro punto san Gregorio llama a Cristo como aquel que se ha hecho teólogo para nosotros. Es decir, la encarnación, según su enseñanza, es la fuente de la teología, porque él mismo no es sólo Dios y hombre sino también Teólogo, es decir, el que ha teologizado de modo ortodoxo, correcto sobre el Padre. Manifestando y revelando el misterio el Padre, él mismo revelo también Su existencia y Su hipostasis y él mismo testificó y dio el Espíritu Santo que ilumina y mediante su iluminación da la gnosis verdadera y real «sobre Dios» y «sobre la Santa Trinidad». Debemos desde el principio señalar que éste método es empírica, por experiencia. La experiencia del Santo empieza con el reconocimiento del hombre a Dios como auto-existencia y según su obra manifestación del mismo Dios y Su Trinidad.
Según san Gregorio, lo primero que tiene que conocer el hombre, el nus humano, para poder acercarse a este misterio, es conocer su propia enfermedad y segundo buscar, como dice él mismo, su psico-terapia, cómo sanarse. Sin esta gnosis o reconocimiento y aceptación de su enfermedad no se puede conseguir la adquisición de la verdadera gnosis de Dios. Esta gnosis hace la catarsis y purificación de la existencia humana y le da también fuerza para la gnosis natural y la teología natural. Esta gnosis es θεοδίδακτος (zeodídactos, enseñada o instruida por Dios) y está sostenida a la fuerza y energía increada que proviene del mismo Dios. El que conoce su debilidad y su propia enfermedad, encontrará el camino por el cual entrará hacia la psico-terapia, sanación y salvación, donde le tocará la divina luz increada de la “gnosis, conocimiento espiritual”, y donde recibirá sofía/sabiduría verdadera que “no está incluida en este siglo”. Entonces aquella famosísima oración hacia el Señor de san Gregorio, “ilumina mi oscuridad y desconocimiento/ignorancia”, es en realidad “un clamor para la adquisición de la gnosis verdadera y real, como regalo del mismo Dios para su manifestación y apocálipsis/revelación”. Esta inenarrable experiencia, la cual se adquiere por la catarsis y la participación de las fuerzas y energías increadas de Dios por el hombre, es para san Gregorio Palamás “indemostrable demostración”. Esta empieza con la fe que está sostenida no simplemente a la gnosis natural, la de las creaciones de Dios, sino a la vez se sostiene “en las realidades y cosas entregadas” tal como las llama san Gregorio. Él está basado en las cosas y realidades “habladas zeántricamente (divo-humanamente) en nosotros” de la una deidad Trinitaria y “las que el mismo Espíritu ha hablado y apocaliptado/revelado en nosotros por los santos…”.
Su teología empírica y la indemostrable demostración, pues, está basada en la homilía zeántrica-divino-humana; con base a las realidades y cosas entregadas de esta homilía zeántrica por el Logos, del mismo Θεάνθρωπος Zeánzopos, Dios y hombre, más la iluminación del Espíritu Santo que apocalipta /revela el misterio de la Santa Trinidad. El método demostrativo que utilizó en su teología san Gregorio está basado exactamente en esta percepción y no simplemente a base de unos principios teológicos o filosóficos, por los cuales se elabora el sistema de la teología. San Gregorio niega el silogismo y método dialéctico (discursivo) exactamente porque este método tiene como base simplemente la gnosis física y está basado sobre los sentidos y el nus del hombre, aislado del acercamiento del misterio de Dios. Por eso esta gnosis dialéctica está pasada o caducada y no puede penetrar y conocer realmente el misterio de Dios. Es decir, su teología empírica sobre la Santa Trinidad está basada a las cosas entregadas, a la apocálipsis/revelación y en general a la gnosis que toca empíricamente el mismo misterio. Este método catafático (afirmación positiva) no simplemente es catafático porque está basado a la gnosis de los sentidos y las cosas inteligibles, sino también tiene como base la propia experiencia del misterio de Dios que se manifiesta y se revela/apocalipta.
Existe lo que es conocido de Dios. Nosotros conocemos que “Dios es” y que “es uno” y “no es lo uno (neutro)” y otras cosas más, las cuales conocemos a base del método demostrativo y la misma gnosis empírica. Estos misterios se hacen perceptibles, como el mismo dice, “por la divina dinami poder y energía”. Hablamos, pues, por medio de la teología natural y adquirimos experiencia de Dios y hablamos por apocalipsis/revelación. Esta vía catafática (lo que sí es, afirmación positiva) por su parte, tal como hemos dicho, se sostiene en la catarsis y en la ascensión de las fuerzas y energías humanas y a la vez mediante la condescendencia de la misma fuerza y energía increada de Dios. Esta gnosis que la tenemos y es apropiada y a pesar de que es una gnosis catafática, a la vez permanece también como desconocida de manera que la teología catafática “sobre la Santa Trinidad de san Gregorio Palamás” conecta sólidamente con la teología apofática (sí, lo que no es. afirmación negativa) y su método. Y tal como la vía catafática es doble, así también la vía apofática y la gnosis de Dios, es decir, su apófasis podríamos decir, es doble. En Dios, pues, existe “lo narrable” y “lo inenarrable”. En la Santa Trinidad existe “lo narrable” y “lo inenarrable”.
“Lo narrable” y “lo inenarrable” en la experiencia mística de san Gregorio conecta estrechamente con su enseñanza “sobre la suprema esencia (increada)” y las energías increadas Trinitarias. La esencia es aquella que es anónima, no participe, inenarrable e inconcebible. Esta es más allá de todo. Lo que sí podemos participar son las energías increadas de Dios. Este discernimiento suyo nos da el poder y posibilidad de la certeza de la existencia humana y el crecimiento del hombre hacia el infinito, porque libera al hombre del núcleo de algo como caducado y limitado, de lo mortal y creado, y así el hombre adquiere aquello que decía san Gregorio de Niza la posibilidad y poder del “fin”, del perfeccionamiento que no tiene fin, es decir, que es infinito. Esta la energía increada de la cual el hombre es capaz de participar, da la verdadera dignidad del hombre y del mundo. Por eso san Gregorio decía que esta enseñanza es la única esperanza del hombre. Y si no existe esta posibilidad y poder de participación de la divina luz increada y de las increadas energías divinas, de la luz Tabórica de la Metamorfosis, entonces el hombre no puede liberarse de su pecaminosidad, de los pazos y tampoco de su naturaleza corrupta y nunca podrá adquirir plena comunión y unión con Dios.
Los discernimientos de esencia y energías increadas en Dios tienen por excelencia carácter sotiriológico (redentor, sanador y salvador), antropológico y cosmológico. Aquí no se trata de una teoría o una percepción filosófica, sino que es muy importante para la existencia del hombre y del mundo en general.
Este discernimiento de las energías increadas Trinitarias y la esencia-usía increada coincide con otro discernimiento de la teología por excelencia de san Gregorio Palamás que es el discernimiento de la divina economía y la teología. La divina economía se realiza para el mundo y el hombre. Por la manifestación o aparición de Dios Padre por economía y se realiza principalmente por la encarnación del Logos de Dios y por la manifestación del Espíritu Santo y la presencia del Espíritu Santo en la realidad del mundo y del hombre.
La teología concierne lo no participe, lo inefable, lo inenarrable, lo anónimo de Dios que contiene la divina naturaleza, la divina esencia-usía y a la vez las divinas hipostasis del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Para san Gregorio Palamás Dios “un Dios el ante o sobre todo y en todo y más que o superior a todo, en Padre, Hijo y Espíritu Santo. Es decir, lo “ante o sobre todo y superior a todo” concierne la teología y lo “en todo” la propia genuina enseñanza sobre la Santa Trinidad y lo “en todo” concierne la divina economía. Aquello que es significativo y muy importante, sobre san Gregorio Palamás es que él mismo no ha desarrollado y escrito por su cuenta unas obras sobre la Santa Trinidad; sino movido por las discusiones y luchas teológicas de la época y a causa de las percepciones heréticas de Barlaam y Akíndinos y lo importante es que aclarando la enseñanza de los Padres habla concretamente sobre las uniones y los discernimientos en la Santa Trinidad.
Primero dice el Santo que la causa común de los dos de la Santa Trinidad es sólo el uno. Es decir, el punto básico en su teología es su enseñanza sobre la monarquía del Padre. El Padre es la causa común del por existencia nacimiento del Hijo y procedencia del Espíritu Santo. Lo común de las tres personas-hipostasis es una esencia-usía hiperúsios suprema o supraesencial. Lo común es también toda donación y toda fuerza y energía.
Por lo tanto, lo omoúsio o consubstancial de las personas, lo omodínamon (misma potencia, fuerza y poder) de la Santa Trinidad y la unidad de la energía Trinitaria (todo esto increado) y la una causa en la Santa Trinidad es aquello que constituye la base de la Triadología de san Gregorio Palamás. A la vez existen en su pensamiento teológico también los discernimientos que él desarrolla para poder afrontar así por un lado, lo equivocado de la herejía del filioque y por otro lado, el discernimiento de esencia y energías, sin haber división a causa del discernimiento dentro de la deidad. Los discernimientos primero son los hipostáticos y segundo los atributos o cualidades naturales de la divina naturaleza, que califican la esencia y la naturaleza, y estos atributos naturales son los que exactamente el santo llama energías.
Estas energías califican de una parte la increada fisis o naturaleza y por otra parte revelan lo uniforme o unitario de la de tres hipostasis de la Deidad, pertenecen también en las tres hipostasis de la Deidad de tres soles y son de la energía del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, mediante las cuales se manifiestan a las personas y también se manifiesta la forma o modo de existencia de las personas. Se aclara y manifiesta que uno es el modo de existencia de las personas que es más allá de toda comprensión y otro es el modo de manifestación, de manera que podamos conocer la forma o modo de existencia de las personas y de las hipostasis, pero no podemos identificar la manifestación y el modo o manera de manifestación con la manera de existencia tal como lo hacía la teología latina. No podemos identificar porque en la Santa Trinidad la única causa es el Padre. Y esta monarquía (un principio) junto con la paternidad es atributo del Padre. Tal como la filiación y la procedencia son atributos de las otras dos hipostasis, y no puede entre ellos haber o sufrir confusión. Es decir, el modo de manifestación se hace desde o del Padre por el Hijo en Espíritu Santo. Pero podemos decir, según el Santo, que se manifiesta también por el Hijo. Aquí encontramos aquella conocida enseñanza de Georgios de Chipre, en la cual san Gregorio manifestando el inenarrable discernimiento dentro en la Santa Trinidad y sosteniéndose en este discernimiento, por un lado el misterio de la Santa Trinidad permanece continuamente inconcebible y por otro lado lo participe de las energías divinas y la posibilidad del hombre de poder participar a la κοινωνία kinonía (participación, conexión, comunión y unión) al misterio de Dios.
Por consiguiente, con lo “por fisis o naturaleza” más allá de toda participación que concierne la esencia y lo trisipóstaton (tres hipostasis) de Dios, indica que realmente Dios permanece entero en sí mismo. Pero la participación pragmática en la plenitud de él, participación de sus energías, a la luz tabórica de la Metamorfosis, testifica que realmente “habita plenamente en nosotros”. Pero este misterio inenarrable no se puede expresar con palabras; se comulga o se toma parte sólo en la en silencio θεοπτία zeoptía (diovisión, visión divina) por los merecidos y dignos de ella y uno de ellos era también nuestro Padre Gregorio Palamás.
Amfiloki Rántovits Metropolita de Montenegro.
SUMARIOS DE LOS CONGRESOS INTERNACIONALES DE ATENAS Y LEMASOL DE CHIPRE.
Traducido por Χρῆστος Χρυσούλας (Jristos Jrisulas) www.logosortodoxo.com, heleno-griego nativo, instruido en la Santa Parádosi-Tradición y en la lengua (katharévusa) del Nuevo Testamento la que actualmente se habla en el pueblo fiel heleno-ortodoxo.